Inicios del mes
de noviembre ,fecha que quedará grabada a fuego para el rescatista Almoustapha
Alhacen ,como el más terrible de su vida .
Hallar en pleno desierto del Sahara los
restos de noventa y dos personas ,la mayoría mujeres y niños dispersos en el
radio de veinte kilómetros ,algunas madres e hijos juntos y niños solos ,
tapados de arena y cuya muerte debe de haber sido terrible ,pues murieron de
sed .
Niger se encuentra en una de las principales rutas entre las
naciones subsaharianas y Europa , pero muchos de los que logran cruzar el
desierto terminan trabajando en el norte de Africa . no se sabe cuál era su
destino ,tal vez era Europa o Argelia .
Se trasladaban en dos camiones , luego de averiarse uno de
ellos continuaron su camino para buscar como arreglar el primero y éste
también quedó varado. Alrededor de diez personas pudieron salvar la vida ,
llegando a destino ,los demás pagaron un alto precio ,por esa cruel aventura en
el desierto .
La desesperación de la sed... ,no debe de haber algo más
terrible y angustiante para el ser humano .
Estas personas encuentran la muerte ya sea cruzando mares o atravesando
desiertos , es lo más inhumano que podamos presenciar , lamentablemente
continua pasando como una película terrorífica ,donde los expectadores ,sólo
podemos demostrar asombro y mucha pena .
NORA
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